Pintura
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Pintura de Dombate

Dolmen de Dombate

Pintura de Pedra Cuberta

Pedra Cuberta

Pintura de forno dos Mouros

Forno dos Mouros

Pintura de Couto dos Mouros

Couto dos Mouros

 

    En los últimos años ha aumentado el interés por el estudio del arte megalítico en Galicia, en parte, gracias a los hallazgos de restos pictóricos en Dombate y Forno dos Mouros. El primero que se ocupó de la pintura megalítica fue Venancio Moreno en l874, al dar la noticia de un dolmen, hoy desaparecido, en Codesás, municipio de Melón (Ourense). Manuel Murguía reprodujo los dibujos de las pinturas en la segunda edición de su Historia de Galicia. También el arqueólogo Federico Maciñeira documentó la existencia de pintura en Penadaguia, en la Serra da Capelada (A Coruña), en los primeros años del siglo XX. 

    Pero es en l934 cuando Galicia nace para la literatura arqueológica, al desvelar el arqueólogo alemán Georg Leisner ante la comunidad internacional la existencia de un dolmen con una extraordinaria decoración pictórica, el de Pedra Cuberta, situado en el municipio coruñes de Vimianzo. En su estudio, Leisner comprueba que en la parte interna de todos los ortostatos de la cámara y del corredor se encuentran dibujos hechos en negro y rojo, sobre fondo blanco, en los que pueden observarse tres zonas claramentes diferenciadas, con un friso decorado en negro en su tercio interior, que separa dos áreas, una superior y otra inferior, en las que predomina el color rojo. En el dibujo se recoge la decoración del primer ortostato del lado izquierdo del corredor, según se mira y permite ver las complejas formas decorativas, con líneas en zig-zag, triángulares y verticales, motivos ondulados...

    En l987 es José María Bello quién va a dar a conocer la decoración del dolmen coruñes de Dombate. El amplio estudio del monumento ha permitido saber que el megalito estaba decorado en su totalidad, tanto en la cámara como en el corredor y que para pintar con los colores rojo (a partir de óxido de hierro) y negro (obtenido a partir de carbón vegetal), se aplicó una imprimación blanca obtenida al mezclar caolín con manteca o mantequilla de vaca. Al igual que el dolmen de Pedra Cuberta, una banda decorada, en esta ocasión en rojo, recorre el tercio inferior de cada uno de los ortostatos.

    Otro de los dólmenes con decoración pictórica es el de Forno dos Mouros,en Toques (A Coruña), hecha pública por Jacobo Vaquero en l988,  puesto que también está pintado casi en su totalidad, con líneas en zigzag, dispuestas horizontalmente, alternándose las líneas en rojo con las de color negro.

   La más reciente aportación corresponde al dolmen de Couto dos Mouros, en Rodeiro (Pontevedra), en el que resultan claramente visibles en su ortostato de cabecera, restos pictóricos en rojo, formando zig-zags. En una finca cercana se localizó otro dolmen pintado al efectuar labores agrícolas, pero fue trasladado al Museo de Pontevedra para su estudio.